El buceo es un deporte que se puede practicar con diferentes fines: recreativos, profesionales, deportivos, técnicos. En todos ellos, la experiencia es siempre única, pues el buceo permite explorar zonas y experimentar sensaciones que de otro modo no estarían a nuestro alcance.
Por submarinismo, en cambio, nos referimos al buceo que se realiza exclusivamente en el mar. En cualquier caso existen distintas modalidades de buceo, cada una con sus respectivas características y con el equipamiento básico de buceo.
En la actualidad, el buceo se ha convertido en una actividad muy extendida. Aunque tiene diferentes fines (deportivo, de investigación…) el recreativo es uno de los principales, pues lo que se busca es llegar a lo más profundo del mar y descubrir sus maravillas con la seguridad debida.
Para practicar buceo es imprescindible tener una preparación base, ya que se requiere tener un certificado con los conocimientos sobre esta actividad. Toda persona interesada en el buceo deberá realizar unos cursos preparatorios y obtener un certificado, a través de organismos como:
PADI: Asociación Profesional de Instructores de Buceo.
El buceo entendido como actividad física presenta una serie de beneficios. Su práctica trabaja diferentes grupos musculares, amplía la capacidad pulmonar y sobre todo mejora las coordinaciones del cuerpo.
En la actualidad, cada vez más personas practican el buceo, ya que es una actividad que te compenetra con el medio acuático, además de proporcionarte relajación y tranquilidad. También es una práctica en la cual se suele estar se acompañado, dando seguridad y confianza.
A rasgos generales, los beneficios del buceo serían:
- Amplia la capacidad pulmonar.
- Proporciona relajación y tranquilidad.
- Mejora la confianza.
- Ayuda a controlar la ansiedad y el estrés.
- Mejora las habilidades psicomotrices.
Como todo deporte, al iniciarse se debe saber en qué situación se encuentra para poder mejorar la condición física. Además no hay que olvidar que en el buceo, se debe tener en cuenta que la fortaleza física y el dominio mental son pilares fundamentales. Al bucear se exige tener una buena condición física y no tener problemas graves de salud; especialmente del corazón, oídos o pulmones, pues son partes que más trabajan con las inmersiones.